Ya sabemos que la gestión privada es mejor, y si no que se lo digan a Rodrigo Rato, Díaz Ferrán y compañía.
El desmantelamiento de todo lo público es objetivo prioritario del PP; ya no pueden chupar de la construcción, pues ahora a chupar de lo público.
Cada día son más amenazante los comentarios de los concejales a los representantes sindicales, a los trabajadores en solitario en sus centros y presumen de ello ante el pueblo. Su frase "nosotros no queremos echar a nadie" Claro que no, su objetivo es que cumplan el contrato los trabajadores así los finiquitamos y luego contratamos a los afiliados del PP, aquellos que actúan de interventores y apoderados en las elecciones y pegan los carteles electorales del PP. Con desmentir en la prensa que no es así, vale; el domingo en misa el cura nos lo perdona y la consciencia queda limpia. Así son las cosas.
¡Qué país de corruptos! ¿Hay alguno honrado? Parece ser que sí, que en las filas del PP-Pinto todavía queda alguno honrado y se empiza a mosquear porque no le informan y le torean todo lo que quieren. Será por esto último por lo que al club taurino de Pinto le subvencionen y se le trate mejor que a otras asociaciones. Algunos concejales de Pinto del PP están aprendiendo a torear de Pecho, Verónicas o chicuelinas; luegon salen a hacer el quite a la alcaldesa para que el concejal o peón de confianza claven las banderillas a los trabajadores. Así, al final, al igual que los toros, los trabajadores serán muertos a estoque por la cuadrilla del PP. Pero ¿Saben ellos que tienen que seguir toreando en Pinto y para ello deben cortar las dos orejas ante los Pinteños?
Los Pinteños, probablemente, cansados de toros y toreros les tiren almohadillas y les bajen en el escalofón.
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